Para resolver el programa de 145 viviendas, se agruparon en 3 bloques dispuestos en forma de U, de modo que todos tuviesen una fachada a la vía de acceso a la parcela, condición que establecía la normativa municipal. Las tres edificaciones se retranqueaban el mínimo permitido de los lindes de la parcela permitiendo liberar el máximo espacio de la misma en su parte central. Este gran espacio distribuía el acceso a los portales y acogía la mayoría de servicios comunes (zona verde, piscinas, equipamiento deportivo, juegos infantiles)
La adaptación de los bloques a la topografía natural del terreno generaba espacios a diferentes niveles bajo la circulación de la urbanización. Aunque con fachada al gran espacio central disfrutaban de una privacidad mayor y se aprovecharon para incluir parte del programa de usos (piscina cubierta, gimnasio, sauna, salón de la comunidad…) Todos los espacios ajardinados se realizaron bajo los preceptos de la xerojardinería, con una elección cuidada de las especies (autóctonas, adaptadas al clima y suelo local y con un consumo de agua mínimo) Finalmente, tres niveles de sótano bajo rasante albergaban las 787 plazas que exigía el programa.
Para satisfacer la amplia y variada demanda comercial se plantearon múltiples tipologías: viviendas en una planta, dúplex con bajo cubierta o dúplex con bajo rasante con modelos de dos a cinco dormitorios. Todos los tipos contaban con una doble orientación de fachada facilitando las ventilaciones cruzadas y diferenciando los usos de día/noche, además de contar con un espacio exterior, bien terraza o jardín privado dependiendo de la tipología.
A pesar de la variedad de tipos de vivienda se buscó un tratamiento de las fachadas que proyectase al exterior una imagen homogénea. Se utilizó un tipo de ladrillo visto que contrastaba con el color claro de la piedra natural utilizada en la fachada ventilada de los volúmenes salientes. En los patios, que necesitaban una mayor iluminación, se utilizó un revestimiento de monocapa prácticamente blanco.
El empleo de materiales de tonos más claros en fachada resaltaba la pizarra de la cubierta inclinada como remate del conjunto en el que se albergaban los sistemas de captación solar y climatización.
