Daze Village es un lugar de confluencias. Los ríos Niyang, Yarluntzangbu y Miruri Road, un camino turístico que une el Tíbet con la provincia de Sichuan se cruzan allí. Además se encuentra el acceso al recinto natural del Cañón Brahmaptra. Estas concurrencias lo convertían en un lugar idóneo para situar un centro de visitantes diseñado por Standardarchitecture + Zhaoyang Architects.

El edificio responde a las condiciones de frontera, y su relación con un entorno natural impresionante supuso uno de los retos del proyecto. Las circulaciones del espacio público son las que tallan el volumen del edificio de un modo irregular y reparten jerárquicamente en los macizos que generan las principales funciones del programa de usos (oficina, vestidor y aseos) cruzándose en un patio central que es el corazón del edificio.

Para la construcción se utilizó el lenguaje de la arquitectura vernácula tibetana. Sobre la cimentación de hormigón se erigieron muros de 60 cm con aperturas rotundas y los muros que aparecen a los lados funcionan como contrafuertes aumentando la estabilidad global. La impermeabilización se resolvió con arcilla de Aga, cuya rigidez aumenta al manipularse con agua, funcionando como una capa impermeable y de aislamiento térmico una vez se ha secado.

El uso del color es otro de los referentes de la cultura tibetana. Se introdujo en el espacio público interior, mediante pigmentos naturales impregnados directamente sobre la superficie de la piedra. Los cambios de color en los diferentes paños enfatizan las transiciones geométricas del espacio. La luz natural, entrando por las diferentes aperturas, genera tonalidades cambiantes que varían según el momento del día y la perspectiva que se tenga multiplicando la experiencia espacial.

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